La normativa Euro 7 propuesta por la Comisión Europea aumentará los costes de fabricación de automóviles y furgonetas en torno a los 2.000 euros por vehículo y en cerca de 12.000 euros los de camiones y autobuses diésel, según un nuevo estudio de Frontier Economics. Estas cifras son de 4 a 10 veces superiores a las estimaciones de la Comisión en su evaluación de impacto Euro 7 (180-450 euros para turismos y furgonetas y 2.800 euros para camiones y autobuses).
Estas estimaciones incluyen solo los costos directos de fabricación, principalmente para equipos e inversiones. Es importante señalar que estos costos adicionales no se corresponden con los precios de compra; en cambio, elevan aún más los precios para los usuarios finales. Por lo tanto, es probable que los aumentos de precios sean más altos que las cifras citadas en el estudio.
Con las normas Euro 6/VI actuales, la UE tiene los estándares más completos y estrictos para las emisiones de contaminantes (como NOx y partículas) del mundo. Las emisiones de escape ya se encuentran en un nivel apenas medible gracias a la tecnología de vehículos de última generación.
Asegura Sigrid de Vries, directora general de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA), que “la industria automotriz europea se compromete a reducir aún más las emisiones en beneficio del clima, el medio ambiente y la salud. Sin embargo, la propuesta Euro 7 simplemente no es la forma correcta de hacerlo, ya que tendría un impacto ambiental extremadamente bajo a un costo extremadamente alto”., y añade que “se lograrán mayores beneficios ambientales y para la salud mediante la transición a la electrificación, al mismo tiempo que se reemplazan los vehículos más antiguos en las carreteras de la UE con modelos Euro 6/VI altamente eficientes”.
Además de los costes directos, la propuesta Euro 7 desencadenará costes indirectos, como un mayor consumo de combustible. Durante la vida útil de un vehículo, esto podría aumentar los costes de combustible el 3,5%, lo que asciende a 20.000 euros adicionales para camiones de larga distancia y 650 euros para turismos y furgonetas. Estos costes indirectos, que se ignoran en la evaluación de impacto de la Comisión, se suman a los costes directos. Se sumarían al costo total de poseer un vehículo, ejerciendo presiones financieras adicionales sobre los consumidores y las empresas en un momento de alta inflación y aumento de los precios de la energía.
Estos límites obligarían a los fabricantes de automóviles a invertir en mejorar el rendimiento de las emisiones de escape, dinero que se gastaría mejor en el desarrollo de vehículos de cero emisiones.
Ocho países miembros de la Unión Europea: Francia, Italia, República Checa, Bulgaria, Hungría, Polonia, Rumania y Eslovaquia, han mostrado su rechazo a Euro 7 y tienen suficientes votos para bloquear la propuesta.
Los ocho países presionan para debilitar los nuevos límites de emisiones de la UE para los automóviles, señalando que son demasiado ambiciosos y poco realistas para que los fabricantes de automóviles los alcancen.
Los países de la Unión Europea y los legisladores se están preparando para negociar la regulación Euro 7, que a partir de 2025 endurecería los límites de emisión de vehículos para contaminantes, incluidos los óxidos de nitrógeno y el monóxido de carbono.
En un documento conjunto, enviado a otros miembros de la UE y desvelado por Reuters, los ocho países aseguran que partes de la ley, incluidas las restricciones a las emisiones de los tubos de escape, deberían eliminarse por completo.
"Nos oponemos a cualquier nueva norma sobre emisiones de escape (incluidos nuevos requisitos de prueba o nuevos límites de emisión) para automóviles y furgonetas", señala el documento firmado por los 8 países. Estos límites, según los firmantes, obligarían a los fabricantes de automóviles a invertir en mejorar el rendimiento de las emisiones de escape, dinero que se gastaría mejor en el desarrollo de vehículos de cero emisiones.
Talleres, recambistas, fabricantes y distribuidores afrontan desafíos de inversión y adaptación, mientras buscan aprovechar nuevas oportunidades de negocio en un contexto de cambio constante.
MotorK ha obtenido la certificación ISO 27001, marcando un hito importante en el compromiso de la compañía con la gestión de la seguridad de la información.
Astre ha añadido a Santos e Vale, reconocida red de transporte y distribución de mercancías con 40 años de experiencia, como nuevo socio a su red. Esta empresa portuguesa ofrece soluciones logísticas personalizadas y tecnológicamente avanzadas.
“Cuanto más chatarra sea el coche, mejor”, apuntaban desde la organización del “Chatarras Raid”, el mayor raid multimarca de Europa, en el que hasta 104 modelos cruzaron Marruecos de norte a sur, desde Tánger hasta Marrakech. Este año, Frenos y Embragues Moprisa, socio de Aser en Logroño, ha patrocinado uno de los vehículos que ha participado en esta divertida, y también solidaria, aventura. Y la experiencia ha sido tan positiva que repetirán.
Los días 5 y 6 de noviembre, Grupo Serca visitó junto a socios del grupo las instalaciones de Clarios en Medina del Campo y Burgos, reafirmando su compromiso con la sostenibilidad y la colaboración con proveedores responsables.