El anuncio de Stellantis de la creación de una plataforma de compensación deja a la mayoría de los perjudicados sin solución; esa es la principal conclusión del análisis que ha realizado Afestel sobre las condiciones “draconianas” (como las ha calificado) que exige Stellantis para reparar económicamente a las víctimas de los motores Puretech.
Stellantis ha lanzado una plataforma online dedicada a evaluar las solicitudes de reembolso de los consumidores europeos que tenían gastos por reparaciones en las generaciones anteriores de los motores PureTech 1.0 y 1.2 (también conocidos como EB) debido a un consumo inusual de aceite y/o una degradación de la correa de distribución.
Los juzgados de Vigo ya han admitido a trámite 15 de las más de 100 demandas presentadas por las víctimas contra Stellantis por los motores fallidos.
La Asociación de Afectados Stellantis (Afestel), que representa a más de 6.000 perjudicados por la mala concepción de origen de los motores 1.0 y 1.2 Puretech de gasolina, ha convocado nuevas movilizaciones para exigir a Stellantis una salida al problema, cuya única solución es la sustitución de los motores y/o el resarcimiento económico.
Afestel confía en que Stellantis, fabricante de los motores Puretech 1.0 y 1.2, se avenga, en una próxima reunión ya programada, a buscar fórmulas de compensación para los miles de usuarios afectados por la compra de vehículos con estos motores defectuosos de fábrica.
Afestel acusa a Stellantis de estar lucrándose exageradamente en la compra-venta de los modelos con los motores Puretech 1.0 y 1.2 con correa de distribución en baño de aceite, al adquirir unidades a precio de derribo y venderlas a precio de mercado, o por encima, con márgenes brutos de venta del 30% y, en ocasiones, superiores.