Briolf comienza el proceso para implantar su primera planta de producción en Estados Unidos

La oficina de comunicación del Gobernador del estado de Carolina del Norte ha hecho público oficialmente el acuerdo entre Briolf Group y las administraciones locales, tanto el estado de Carolina del Norte como la ciudad de Monroe (Condado de Union), por el que se inicia el proyecto de establecimiento de la primera inversión productiva en Estados Unidos de la empresa con sede en Girona.

Ubicada en la ciudad de Monroe, a unos 40 km de Charlotte, la inversión prevé la adquisición de un terreno de más de 130.000 m2 para poder desplegar durante los próximos años la construcción de lo que se llamará Briolf Campus, que permitirá acoger instalaciones productivas de las diferentes líneas de negocio del Grupo.

El proyecto está previsto en diferentes fases y contempla, en primera instancia, la construcción de una fábrica para producir localmente la gama Roberlo, para posteriormente y de manera gradual, ampliar las capacidades y recursos productivos para poder fabricar localmente productos de la división de aerosoles o adhesivos.

La previsión de la empresa es que el proyecto durará un mínimo de 2 años hasta poder empezar su actividad productiva, generará 100 puestos de trabajo directos y supondrá una inversión total superior a los 30 millones de dólares.

El presidente de Briolf Group, Jaume Juher, confirma que “estamos ante un hecho histórico para nosotros a nivel cualitativo y cuantitativo”. Según afirma la compañía, “la inversión estaba prevista como uno de los elementos más importantes del Plan Estratégico 2022-2026” y destaca el significativo peso que ha de tener en el futuro de la compañía. “Tener un centro productivo en EE. UU. nos permite atender de manera directa el importante mercado actual en la región de Norteamérica. Y al mismo tiempo, nos posiciona mejor para afrontar las muchas oportunidades de crecimiento que nos ofrece el mercado norteamericano”.

Como recuerda Jaume Juher, “este ha sido un camino muy largo desde que, en la década de los 90, se iniciaron las primeras actividades comerciales con EE. UU. Años de mucho trabajo, dificultades y también algunos errores de los que hemos aprendido mucho. Pero como siempre en la historia de Briolf Group, el acierto de muchas personas ha hecho que el viaje haya valido la pena y que ahora estemos ante un reto único”.