Nines García (Ancera): "Aunque la tendencia sea a hibridarse, el parque seguirá moviéndose principalmente en motorizaciones convencionales"

Nines García de la Fuente asumió la presidencia de la Asociación Nacional de Comerciantes de Equipos, Recambios y Accesorios (Ancera) el pasado mes de noviembre de 2022. Elegida por unanimidad, tomó entonces el relevo del presidente saliente y gerente de Aser, José Luis Bravo.

La nueva presidenta de la patronal lleva tres décadas en la posventa. Ha trabajado al pie del cañón desde Pedro Sanz, Bosch y Delphi. Y ahora desde Groupauto Unión Ibérica y Ancera. Conoce exhaustivamente, por tanto, la labor del fabricante y también la de la distribución.

Ya en su momento anticipó su firme voluntad de proyectar el legado de Bravo, aunque las circunstancias no acompañasen. Un contexto de "nueva normalidad" condicionada por importantes desafíos como los que subraya en esta entrevista: rentabilidad, crecimiento, mejoras en digitalización, inventario y transporte y atención al cliente. Entre otros tantos.

Tres meses después de su llegada a la presidencia, con una Nines García de la Fuente ya más que asentada en el cargo, en Posventa de Automoción hemos querido conocer al detalle cómo están siendo los inicios de su legislatura y su visión sobre la actualidad del sector.

La nueva presidenta de la patronal lleva tres décadas en la posventa. Ha trabajado al pie del cañón desde Pedro Sanz, Bosch y Delphi. Y ahora desde Groupauto Unión Ibérica y Ancera. 
 

¿Cómo afronta su llegada a la presidencia de Ancera?
 

Con ilusión y ambición, que es como considero que debe comenzarse cualquier proyecto profesional, incluso personal. Y con confianza. 

José Luis ha dejado el camino allanado y el equipo de Ancera es un pilar fuerte sobre el que apoyarse. Creo que las circunstancias no podrían ser más favorables para embarcarse en un proyecto tan ilusionante y que aporta valor al conjunto de la posventa.

¿Qué siente al saber que ha sido elegida por unanimidad?

En Ancera somos un equipo. Todos los miembros de la junta, cuando nos sentamos en Príncipe de Vergara, vamos a una. En este sentido, tomamos cada decisión en conjunto y solemos tener posiciones muy afines frente a los temas de mayor relevancia. 

Me siento muy agradecida, no solo de contar con el apoyo de todos los socios, sino con ser parte de una familia posventera con ese sentimiento de pertenencia y unión tan arraigado.

Durante los últimos años ha ejercido como vicepresidenta. ¿Cómo ha sido esa etapa?

Estos últimos años han sido una etapa de mucho crecimiento para Ancera, y para el sector en general. Nos hemos enfrentado a situaciones adversas para las que no estábamos del todo preparados y nos ha tocado crecer. Me refiero a la Covid-19 y a los problemas de suministro.

En ese sentido, ha sido bonito ver como Ancera no solo sobrevivía, sino que además se venía más arriba que nunca y salía fortalecida.

Tomar el relevo de José Luis Bravo era tal vez el paso lógico. 

Desde la llegada de José Luis, la presidencia de Ancera ha pasado de ser un cargo ejecutivo a uno más representativo. La tarea más ejecutiva recae sobre la secretaría general, donde Carlos (Martín) hace un gran trabajo.

Con ello, pretendemos dar homogeneidad a la asociación y marcar un camino que evolucione, pero sin poner patas arriba el trayecto ya recorrido. 

Por eso, la idea es que cada miembro que compone la junta directiva sea fundamental. José Luis accedió a coger el cargo de forma provisional, pero nos sorprendió la pandemia y este periodo se vio alargado. Una vez recuperada cierta estabilidad en esta “nueva normalidad”, era el momento de retomar la alternancia y que otro miembro del equipo diera el paso.

Desde la llegada de José Luis, la presidencia de Ancera ha pasado de ser un cargo ejecutivo a uno más representativo. La tarea más ejecutiva recae sobre la secretaría general, donde Carlos (Martín) hace un gran trabajo. 
 

Afrontar la presidencia no debe ser tarea fácil, sobre todo, teniendo en cuenta que la compatibiliza con su papel de directora de operaciones en Groupauto Unión Ibérica. 

Como decía, mi cargo es principalmente representativo. Ancera cuenta con el saber hacer y trabajo diario de Carlos, al frente de un equipo preparado en el que depositamos toda confianza. Y a la vista está que están haciendo un magnífico trabajo. 

Mi labor, junto al resto de la junta, es guiar, pero un buen guía debe saber descansar sobre quienes le rodean. Obviamente, ahora tengo una responsabilidad adicional, pero con una buena organización y un buen equipo se puede llegar siempre muy lejos.

En anteriores ocasiones, ha adelantado que la idea es seguir la línea marcada hasta el momento. ¿Cuál será la hoja de ruta?

Desde la junta Directiva de Ancera establecimos cinco ejes de trabajo y desarrollo de la asociación: representativo, normativo, operativo, comunicativo y recuperación y resiliencia (este último ya concluido, ya que surgió a raíz de la pandemia). 

Seguimos trabajando y avanzando acorde a nuestra estrategia, trabajando en esta línea y en hacerla crecer y evolucionar al ritmo del propio sector.

Desde la junta Directiva de Ancera establecimos cinco ejes de trabajo y desarrollo de la asociación: representativo, normativo, operativo, comunicativo y recuperación y resiliencia.
 

¿Cuáles son, a su juicio, los principales retos a los que se enfrenta la distribución en estos momentos?

En Ancera realizamos un estudio del sector cada trimestre, con un informe global a fin de año. Precisamente, acabamos de publicar los datos relativos a 2022, donde el propio sector nos cuenta sus retos a corto plazo: rentabilidad, crecimiento, mejoras en digitalización, inventario y transporte y atención al cliente.

Estos años estamos viviendo, además, un momento de transformación tecnológica que, en mi opinión, será otro de los retos que continúen sobre la mesa.

Los retos del sector a corto plazo son: rentabilidad, crecimiento, mejoras en digitalización, inventario y transporte y atención al cliente. 
 

Hablando de retos, ¿cómo cree que están afectando a la distribución los problemas de suministro y la subida de los costes y las materias primas?

Hemos tenido que analizar de forma exhaustiva la demanda para poder servir de manera eficiente al taller. Necesitamos tener la pieza para poder realizar esa venta. 

En momentos tan complicados, se ha requerido un esfuerzo adicional para responder en el servicio al taller y, siendo positivos, nos ha ayudado a analizar de forma más profunda lo que van a vender, cuándo lo van a vender y buscar las posibles soluciones para garantizar la venta.

Aunque está claro que, en algunos casos, esto ha conllevado a la reducción de nuestra rentabilidad.

Otra de las grandes preocupaciones del sector es la falta de matriculación. ¿Supondrá un problema para la posventa?

Esta crisis de suministros viene también agravada por el descenso de fabricación y matriculaciones, que es un dato que debe inquietarnos, ya que son coches que no entrarán en los talleres multimarca mañana. El parque envejece y los vehículos de más edad implican inversiones menores. En definitiva, nos encontramos un escenario de incertidumbre, de inseguridad, que debemos afrontar, trabajando con ganas y esfuerzo, como nos caracteriza al sector.

Cada vez más se habla de electrificación y propulsiones limpias. ¿cómo afectará esta transición a la distribución?

Los objetivos institucionales de cara a la electrificación del parque son muy ambiciosos. Pero la realidad, los datos, nos demuestran que solo el 0,4% del parque español es eléctrico. Y la venta prevé alcanzar el 1,5% en los próximos 5 años. 

Aunque la tendencia sea a hibridarse, el parque seguirá moviéndose principalmente en motorizaciones convencionales. Eso sí, con un parque envejecido que se moverá en una edad media en torno a los 13 años. Creo que a corto-medio plazo, a la distribución debe preocuparnos más este dato que el de la electrificación per-sé.

Aunque la tendencia sea a hibridarse, el parque seguirá moviéndose principalmente en motorizaciones convencionales. Eso sí, con un parque envejecido que se moverá en una edad media en torno a los 13 años. 
 

¿Cómo desearía que fuese el 2023 para la asociación?

Desearía mantener una línea de crecimiento constante. Es decir, avanzar, pero con un desarrollo homogéneo. Ese es el mejor de los escenarios para la distribución este 2023. Y Ancera es distribución, con lo cual su objetivo debe ser el de sus socios.

Creo que desde la asociación se puede seguir haciendo un gran trabajo, puliendo los proyectos ya establecidos y desarrollando otros nuevos, que acompañen y den apoyo al sector. Y, por último, defenderlo ante organismos e instituciones para que puedan ser más competitivos y seguir innovando con servicios de valor añadido en la posventa.

Imagínese que soy un hada madrina y puedo conceder tres deseos. ¿Qué pediría para la distribución?

Rentabilidad, evolución y futuro.

¿Y para los fabricantes?
Dinamismo, evolución y futuro.

Creo que todos los eslabones de este sector, desde talleres hasta fabricantes, pasando por la distribución, somos parte de un mismo objetivo: si hay trabajo, si hay dinámica y movimiento, si sabemos adaptarnos y desarrollarnos al ritmo (evolucionar), habrá futuro para todos. Y esa debería ser, siempre, la meta de cualquier negocio: continuar aquí mañana generando valor: a la economía, a la sociedad y a nuestro entorno.

¿Cómo cree que el sector percibe a Ancera? ¿Cómo le gustaría que fuera percibida?

El feedback que nos llega del sector es que el trabajo de Ancera está en valor de todos. 

Si bien siempre se ha hecho un gran cometido desde la asociación, ha sido en los últimos años cuando mejor se ha comunicado ese trabajo. Sin duda, me gustaría que esta siguiera siendo la línea durante mi presidencia, la de un trabajo bien hecho que, además, se muestra y llega a todos los rincones de la posventa.