La Comisión Europea ha acusado a los fabricantes de baterías de arranque para automóviles, Banner, Clarios, Exide, FET (y su predecesora Elettra) y Rombat, al organismo comercial Eurobat y a su proveedor de servicios Kellen de pactar para aumentar los precios de las baterías de arranque para automóviles.